Con el empuje de la afición vallenata y el buen fútbol de la tricolor, Colombia conquistó la medalla de oro en el fútbol femenino, al derrotar 3-0 a Venezuela.
Una noche mágica para las cafeteras en el Armando Maestre Pavajeau, que desde el pitazo inicial arrinconó a las vinotintos con un fútbol práctico que fluyó por las bandas y encontró los espacios para llegar con facilidad a predios venezolanos.
Producto de esa superioridad en ataque, el elenco tricolor, dirigido por Carlos Paniagua, encontró la apertura en el marcador, en un potente remate frontal desde 22 yardas de Iliana Izquierdo que se filtró por el palo derecho de la arquera Hilary Azuajes.
Las cafeteras insistieron en el frente de ataque de la mano de María Camila Reyes y Liceth Serna y a los 23 minutos llegó el segundo en un remate cruzado de Gabriela Rodríguez, la misma que a los 33 marcó el tercero para las locales.
El buen trabajo en defensa de Colombia opacó la propuesta ofensiva de Venezuela, que no encontró la fórmula para inquietar a la zaga colombiana.
Para el complemento, en nada cambió la radiografía del compromiso. Un equipo colombiano dueño del balón, con la tranquilidad de la ventaja y un elenco venezolano entregado futbolísticamente. La única acción de gol para la vinotino llegó en un zapatazo de Angema Baron que se estrelló en el vertical derecho.
Sonó el pitazo final y la celebración cafetera se trasladó a las gradas en donde la afición demostró que en Valledupar el deporte se hace leyenda.